J19: Derrota merecida en Manresa

Victoria muy merecida por 80 a 59 de un Assignia Manresa, que con la receta de defender a muerte y cargando su juego ofensivo en posiciones interiores con la pareja Asselin y Doellman, posiblemente los pívots más en forma de la competición, y en sus aleros fuertes Downs y Hanga nos castigaron sin piedad. El partido que nos ha planteado Ponsarnau ha sido de mucha exigencia física a un equipo, el nuestro, que se le ha visto muy cansado y tocado por un temporada en el que entre las bajas y las enfermedades se prevé que se pueda hacer muy larga.

El primer cuarto fue muy igualado con unos primeros 5 minutos dónde Mike Hall anotó los primeros 9 puntos del equipo y dónde el Manresa cargaba todo su juego ofensivo en sus interiores. En la otra mitad del cuarto, todo continuó igualado y el empate a 17 con el que terminó el cuarto, tras un triple en el último segundo de Achara mostraba la realidad vivida en el Nou Congost.

El segundo cuarto el Manresa dio un paso hacia delante en la defensa y nos costaba anotar un poco más, pero lo seguíamos haciendo regularmente, hasta que tras canasta de Sergio Sánchez que ponía el 23 a 22, el saque de fondo hacia Gladyr, los árbitros interpretaron una falta antideportiva de Jon, muy dudosa, que supuso que el equipo manresano anotara 5 puntos seguidos y cogiera una renta de 6 puntos, 28 a 22, que para estos partidos tan igualados es una renta importante. A partir de aquí, el Baloncesto Fuenlabrada comenzó a perder balones y a conceder canastas en contraataques y bandejas para un parcial de 18 a 2. Sin embargo, la ventaja al descanso era de "sólo" once puntos, 41 a 30, algo que parecía poco, después de ver el atasco ofensivo de nuestro equipo.

Tras el descanso, el Assignia Manresa salió decidido a cerrar el partido y vamos que si lo hizo. En este cuarto, el equipo Manresano salió muy fuerte en defensa y en ataque siguió jugando en las posiciones interiores, lo que le permitía conseguir puntos de manera fácil. Así, según iba avanzando el cuarto, la ventaja era cada vez más amplia, sin que nuestro equipo pudiera reaccionar. El cuarto terminó con la máxima renta, 68 a 45.

El cuarto final fue un cuarto innecesario, un cuarto dónde la afición manresana disfrutó de un equipo muy trabajado y con la ilusión puesta en que esta temporada podrían conseguir cotas muy altas.

Desde aquí, dar la enhorabuena al equipo manresano y desearles mucha suerte, porque cuando se trabaja bien con los pocos recursos que se tienen, las cosas suelen funcionar. Este equipo es el reflejo más fiel al nuestro. Si no fuera de Fuenlabrada, el Manresa sería mi equipo.

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